Entradas populares

3 de junio de 2013

El Zen, el arte de olvidarse de uno mismo…


                    Si bien entiendo, por Zen, como el budismo, una ejercitación de la concienciauna actividad que trata de armonizar lo consciente con lo inconsciente. Una conciencia cotidiana de hacer las necesidades básicas sin ninguna pregunta, ni razonamiento. Volver al niño que se fue y hacer de las labores de la vida, una subsistencia sin interrogaciones del porqué, dónde y cómo. El Zen es entonces, el arte de olvidarse de uno mismo.

En el libro: ‘el zen, en el arte del tiro con arco’ Larelación entre el Zen con el arte del tiro, (Y aclarando al“arte” del tiro de arco, no como deporte, Si no, más biencomo un ritual) es una simple analogía del ser espiritual con el ser físico. Al decir que el arquero, la flecha y el blanco son una sola energía, trata de expresarnos que para lograr hacer lo que se quiere hacer y lo que a uno le gusta ser, hay que despegarse del ser físico y dejarse llevar por la energía que esté ser proyecta.

Así pues, si relacionamos el zen con la actuación. O más precisamente con las clases que tiene un actor en formación. La idea es que mediante esos juegos de improvisaciones, cambios de roles y actividades que necesitan de mucha concentración, tales como “el juego de la estatua”, “el juego de imitación” y demás dinamismosdonde siempre el papel principal es para la imaginación. Se logre llegar a una búsqueda de liberación del <yo> físico, Sin duda se puede decir que es una búsqueda hacia sí mismo.     Y así pasar a un estado zen, donde actuar parta de realizar las acciones por destreza innata de un cuerpo no pensante.

Tal tarea, parece fácil, pero para ser un ser zen, hay que desprenderse de muchas índoles, superar miedos y adentrarse a un mundo totalmente diferente e inequívoco.¿Pero, cómo llegar a ese punto de espiritualidad acertada?La meditación es la forma en que se llega, y volviendo a la actuación, los juegos escénicos en los que un actor, brota toda su destreza; serian el camino hacia el fin, que vendría siendo también el comienzo. Un nuevo <yo>.

Eugen Herrigelen estos párrafos tomados de su texto, me aclaro el sentido que le doy al zen, relacionado con la actuación. Y porque no, con la vida misma. La finalidad es vivir como un ser libre y feliz. Y actuar sin miedo, disfrutando cada momento.


<El hombre intrépido debe saber desprenderse de la existencia silencioso e impasible.>

 

<De manera que su existencia conozca únicamente

horas felices. La suprema libertad aún no se le ha convertido en necesidad absoluta.>

 

 

 

                               Por: Karen Eraso

1 comentario:

  1. ¡Hola!
    Muy buen blog, me gusta mucho como escribes. Yo también tengo un blog en el que publico lo que escribo ¿podrías pasarte? Estoy empezando y no tengo muchos seguidores, ¡un saludo!

    ResponderEliminar